No se si os he contado cómo me detectaron la miopía.
Es una graciosa historia que se remonta a 8º de EBG.
Aunque no os lo creáis, yo era muy tímida y me sentaba al final de la clase. Para pasar desapercibida. Yo recuerdo esforzarme mucho para ver la pizarra, pero nunca comenté nada a nadie lo que me costaba tomar apuntes.
Un día hicieron el típico reconocimiento médico en el cole, entre otros chequeos, me sentaron para comprobar la vista y me pidieron que leyera en alto lo que tenía enfrente.
Yo empecé a decir 4, 8, 0….
– «Son letras, niña» Me interrumpió aquel hombrecillo mientras movía su cabeza de derecha a izquierda desaprobando este descubrimiento y apuntando como un loco en sus papeles algo que yo quise imaginar como «Cegarruta de cojones«.
Hete ahí cómo la Señora Miopía se estableció en mi vida con unas gafas fatales de montura transparente con motivos azules en la zona superior. Yo y Miss Daisy, primas hermanas.
Os cuento esto para que os pongáis en situación: miopía, pocas horas de sueño, ordenador a tope, entre medias, frikeando en el móvil… ¿Que si no se me han caído ya los ojos? Por ahora not, pero a veces les noto con ganas de tu a Boston y yo a California. Al final del día siento los ojos cansados y me escuecen una barbarité, y más ahora con la alergia, que parezco uno de los de Walking Dead, con los ojos inyectados en sangre. Estoy pa’foto. Divain.
Yo no tenía ni idea que existían unas lentes especiales para reducir el impacto de la luz azul que desprenden los aparaticos tecnológicos que tanto nos molan en esta casa de Tócame Roque. BlueControl se ofreció a que probara estas gafas para prevenir o amortiguar ese cansancio. A ver, nada como controlar la exposición masiva delante del ordenador y 8 horas de sueño reparador, pero, ¿Qué es eso para una madre que curra en casa en horas intempestivas? Como los unicornios, pura mitología.
Aunque las uso sobre todo para leer en el móvil, estas gafas, por cierto muy ligeritas, reducen el brillo que emiten éstos dispositivos, hacen que consiga leer mejor (más claro) y al final del día me noto los ojos menos fatigados.
Yo pensaba que eran solo para adultos, pero para mi sorpresa, y con toda la lógica del mundo, también lo pueden usar los niños, ya que son ellos los frikis del mañana 🙂 Aunque algunos babyfrikis empiezan bien pronto a lidiar con los aparatejos….