Relaxing mom

[AVISO: Post ñoñete-reflexivo_Porque detrás de un proceso vírico, la neurona a veces reflexiona. A veces.]

Después de dos años y medio de experiencia como madre, con las preocupaciones propias inherentes a cualquier madre/padre primerizo, porque todo es nuevo y la cosa va de ensayo-error, ensayo-error hasta que das con tu WayOfLife en esto de la m/paternidad, puedo prometer y prometo que estoy en la senda de ser una Relaxing Mom.

Debo decir que el gordo fue canela en rama de pequeñín, no lloraba nada (o lo justo, cuando tenía hambre), se lo jamaba todo, cagaba como un mirlo, y sonreía a cualquier chorradilla que yo le hiciera, ¿Qué más se puede pedir? Pero durante el primer añito de vida también sufrimos el pack maligno de las -itis, tales como la bronquilitis, conjuntivitis, otitis, amigdalitis… Y claro, tener que enchufar a la criaturica ventolín, aerosoles, o verle toser como un perrete con tubercolisis, el cuore se te sale por la boca, la verdad.

Una sufre, quizá no en silencio, porque rajo cosa mala, pero, y perdón por la perogrullada, vamos a ver, los viruses, como los moratones  forman parte de la vida. Se va a poner malito y una no puede hacer nada para evitarlo. Así que, como canta la princesa Elsa en Frozen, «Let it goooo» y que el cuore se pose en su sitio. Que corra, se caiga, comparta bacterias con los compis, que ría, que salte…

diariodeunaendorfina_28_octubre_2014_relaxinmom_cuore

El corazón volverá a mudar de sitio, esto viene implícito con la maternidad, sube y baja, pero el espíritu de Relaxing Mom se ha apoderado de mi. Sigo vigilante de sus toses y mocámenes, de sus porrazos por las esquinas, de sus caídas libres haciendo el bruto… Pero me lo tomo todo como un devenir propio de la vida. Y de la escuela infantil, claro, que se van pasando los virus como si fuera una litrona en un botellón y los mordiscos como perros enrabietados.

Soy una Relaxing Mom, que a veces le gustaría estar/ser más relaxing.  

Soy una Relaxing Mom cuando hay personas que se llevan las manos a la cabeza cuando descubren que Óscar se chupa el dedo.

Soy una Relaxing Mom cuando me dicen que debería intentar quitar el pañal al peque y que haga pis y cacona en el váter.

Soy una Relaxing Mom cuando me dicen que Óscar debería hablar más y mejor…

Soy una Relaxing Mom cuando veo a mi churrumbel feliciano. Porque me hace feliz a mi, y la rueda se completa, porque entonces, es cuando llega el verdadero relax.

Mi gordo siempre ha tenido su propio ritmo, y no voy a ser yo quien lo cambie.

Esta Relaxing Mom no tiene prisa, «Prisa mata» que decían en Chaouen mientras esperaba por un té moruno más de una hora… Así que esta Relaxing Mom con su relaxing churrumbelillo se van a dejar llevar un poquito, ¿Cantas con nosotros? Let it goooo, Let it goooo…

diariodeunaendorfina_28_octubre_2014_relaxinmom_insignia